Reaccionar Ante Las Críticas En Marketing Online

Si nadie te critica, probablemente es porque nadie sabe lo que estás haciendo o – peor aún – porque a nadie le importa.

La única forma de evitar las críticas es pasando desapercibido, lo cual generalmente no es una buena forma de construir un negocio sostenible en Internet (hagas lo que hagas, necesitas una audiencia.)

A medida que avances en tu proyecto de marketing online y tu audiencia vaya creciendo, te van a criticar. Da igual si tu tráfico proviene de un blog, de un foro, de las redes sociales o de una lista de suscriptores de e-mail marketing; cuando alcances un cierto volumen, tendrás que lidiar con las críticas. Posiblemente te lluevan las críticas, lo cual no tiene por qué ser algo malo necesariamente.

Para bien o para mal, la crítica es inevitable. Si crees en lo que haces, transmites tu pasión genuinamente y defiendes tus convicciones, tendrás que leer y escuchar cosas que no te gustan.

Pero aunque las críticas son inevitables, sí está en tu mano decidir cómo reaccionar ante ellas así que en el artículo de hoy vamos a repasar algunos consejos para prepararnos mentalmente.

Criticas En Marketing Online

A nadie le gusta que le critiquen, especialmente sin razón. Recuerda que el marketing online es una carrera de fondo, así que si quieres tener éxito a largo plazo (y no perder la cabeza por el camino) no puedes permitirte el lujo de ofenderte con facilidad.

Pero una cosa es la teoría, y otra cosa es la práctica. Es doloroso que critiquen tu trabajo, y peor aún que malinterpreten tus intenciones, pero te aseguro que es más duro aún que nadie sepa lo que estás haciendo. No tener audiencia. El anonimato.

No puedes permitirte el lujo de ofenderte con facilidad”, pero reconozco que te lo dice una persona que sigue ofendiéndose cada vez que alguien se da de baja de su lista de correo o le marcan un vídeo en YouTube con el temido pulgar colorado hacia abajo. Qué le vamos a hacer.

Mi recomendación principal cuando recibas una crítica es separar el fondo de la forma, y saber distinguir entre la crítica constructiva y la destructiva.

Sinceramente pienso que la inmensa mayoría de las personas no se despiertan cada mañana pensando “a ver a quién puedo machacar hoy…” Seguro que las hay, pero afortunadamente son una minoría. Y lo que desde luego no hacen es aliarse para ver cómo entre todas pueden fastidiarte a ti. Siento comunicarte que no eres el centro del universo y la gente por lo general tiene otras cosas más importantes que hacer.

Esto quiere decir que la mayoría de las críticas serán bienintencionadas y constructivas; nuestra audiencia quiere transmitirnos algo, e independientemente de las formas que se utilicen, conviene centrarnos en el fondo de la cuestión. ¿Tienen razón?

Por muy duros que seamos con nosotros mismos en nuestra actividad de marketing digital, es mucho más fácil (y rápido) mejorar cuando recibimos críticas de fuera. De aquellas personas para quienes con tanto cariño elaboramos nuestro contenido.Si cometes un error en un artículo, o dices algo que sencillamente no es cierto, tus Usuarios pueden criticarte por ello. En este caso serán críticas constructivas – que pueden herir más o menos según las formas utilizadas – pero en cualquier caso conviene no tomárselo como una afrenta personal y tomar nota para la próxima vez.

Sin embargo, ¿qué ocurre cuando nos critican y no tienen razón bien porque claramente el que critica se equivoca objetivamente, o porque su crítica hace alusión a algo sobre lo que existen distintas interpretaciones?

En este caso, la crítica estimula el debate y debes interpretar como una buena señal que alguien se haya tomado la molestia de consumir tu contenido, y defender su punto de vista subjetivo. No debes interpretarlo como una crítica, sino como algo estimulante – una buena noticia – para tu Comunidad.

Fíjate que hasta ahora hemos extraído la esencia de la crítica, y no hemos reparado en el fondo… El tono que utilicen para criticarnos, que indudablemente puede ser muy variado, tiende a nublar nuestra objetividad a la hora de valorar una crítica y por eso debes mantenerte al margen.

Si alguien se toma la molestia de hacerme una crítica bienintencionada y constructiva – aunque no me gusten las formas – habitualmente considero oportuno responder, en primer lugar agradeciendo el comentario y luego (1.) rectificando mi error o (2.) indicando que hay distintas opiniones o puntos de vista al respecto, y que cada uno tiene derecho al suyo.

Procuro no entrar en interminables debates estériles – que no suelen llevar a ninguna parte – y aunque no me gusten las formas en ningún caso me coloco al mismo nivel. Y allí termina el tema. No puedes permitirte el lujo de andarlo rumiando en la cabeza durante días o semanas, y desde luego las críticas destructivas conviene ignorarlas por completo.

Una vez me explicó un amigo que estaba estudiando psicología que buena parte de los trastornos mentales – específicamente la depresión y la ansiedad – se pueden achacar a dos tipos de comportamientos: (1.) estar continuamente dándole vueltas a algo que nos ocurrió en el pasado, deformando lo que realmente pasó y (2.) estar continuamente dándole vueltas a algo que todavía no ha sucedido, imaginándonos todo lo malo que puede ocurrir. Me pareció una explicación brillante y tremendamente elegante, que puede aplicarse perfectamente a nuestra reacción ante las críticas.

La crítica es inevitable, pero ofenderte o hundirte por ello está en tu mano. Es una pérdida inútil de energía, y no merece la pena.

Tú te has marcado una ruta – un camino que conduce hacia el éxito en marketing digital – y tienes que seguirlo hasta el final. Destila la esencia de la crítica, aprende de ello, y sigue caminando.